Como dice Camilo, tu hijo, fuiste condenado a la dura realidad del olvido publico… mas nunca estarás por fuera de la memoria de quienes, de una u otra forma, estuvimos contigo, porque, de una u otra forma nos acompañas en el diario devenir de nuestros días…
El crimen que cometieron contra ti, va profundizandose mas y mas en la impunidad y, es cierto, somos ya pocos los que seguimos diciendo: NO TE OLVIDAMOS
Gracias Camilo, por traer a nuestro presente a este hombre que dejó inundada nuestra existencia de su esencia, de su ética revolucionaria, de su opción por la defensa de la vida en dignidad…
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